El miedo en los niños se puede ver desde los meses de nacimiento, sin embargo, es más visible acercándose a los 3 años de edad, cuando el pequeño aún no comprende el mundo que le rodea y no posee herramientas para defenderse.

El miedo es importante para el ser humano, es una reacción natural y fisiológica diseñada para protegernos en situaciones de peligro inmediato o potencial, le permite al menor entender el mundo.

Muchos niños expresan miedo ante situaciones cotidianas y pueden aparecer y desaparecer según el niño va creciendo y reconociendo su contexto. Los más comunes son: miedo al abandono, a la oscuridad, a lo desconocido, a la pérdida de un ser querido, la separación de la figura de apego, ruidos fuertes, etc.

Recomendaciones para padres:

1. Trata de comprender y empatizar con el pequeño, explícale que el miedo es normal y necesario para la sobrevivencia.
2. No lo obligues a cambiar de actitud, no lo avergüences ni lo regañes, mejor hazle saber que no está sólo.
3. Conversa con él. Dale espacio necesario para que exprese sus preocupaciones y miedos, Escúchalo con atención y transmitele confianza, seguridad, tranquilidad, afecto.
4. Explícale que, a veces, tú también tienes miedo. Compartir esta experiencia con el niño le ayudará a entender que es una emoción que cualquiera puede experimentar.

Recuérdale que es valiente y puede enfrentar su miedo y que sólo los que han sentido miedo pueden       llamarse valientes.

5. Ayúdale a analizar racionalmente que está fuera de peligro. En este sentido evita decir “no debes tener miedo” y haz preguntas más que comentarios de modo que lo hagas reflexionar. Por ejemplo. ¿qué te hace pensar que ese ruido es un monstro?.

Después pueden ir analizando realmente lo que le está dando miedo. Por ejemplo, “ese ruido que se escucha es la madera de la casa tronando”, o “es el perro del vecino jugando”

6. Poco a poco, acompáñalo a afrontar aquella situación que le da miedo. Ayúdale a que analice su nivel de miedo y proporciónale estrategias para que lo venza, el que se sienta capaz de ir enfrentado sus miedos lo va a ir haciendo sentir seguro.

Se recomienda apoyarlo paso a paso a superar sus miedos, por ejemplo, si el miedo es a la oscuridad:

• Primero dormir con una pequeña luz toda la noche.
• Luego apagar la luz cuando el niño se haya dormido.
• Después cuando ya se esté durmiendo.
• Y finalmente apagar la luz cuando se acueste.

7. Practica mindfulness con el niño. Se ha comprobado que es una gran estrategia para bajar la ansiedad que genera el miedo y situarlo en el aquí y ahora.

8. Si la situación no mejora o se sale de control, es recomendable pedir ayuda a un profesional. En Mi Espacio en Línea tenemos profesionales que te pueden apoyar para que puedes abordar esta y otras problemáticas con tus hijos.

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