¿Cómo saber si es depresión?

¿Cómo saber si es depresión?

¿Estoy triste?, ¿Estoy cansado?, ¿Tengo flojera? o ¿Estoy deprimido?

 

De esos días en donde tu estado de ánimo está por los suelos, no tienes ganas de nada, las cosas que te daban placer, ahora no significan nada, pero todos los días te levantas, te bañas, acudes al trabajo, comes, pareciera que no tuvieras nada.

 

Dudas, ¿es sólo flojera o estoy deprimido? 

 

La mayoría de nosotros nos hemos sentido tristes, melancólicos, infelices, abatidos o derrumbados en algún momento, pero lo hacemos por periodos cortos de tiempo. La depresión clínica es un trastorno del estado de ánimo, en el cual existen sentimientos de tristeza, pérdida, ira y/o frustración que interfieren directamente con nuestro día a día y tienen una duración mucho más prolongada, semanas e incluso meses. 

 

La depresión no distingue género, raza, edad o posición socioeconómica y se presenta de diversas maneras, pero algunos de los síntomas más comunes son los siguientes: 

 

  • Estado de ánimo irritable o bajo la mayor parte del tiempo
  • Dificultad para conciliar el sueño o exceso de sueño
  • Alteraciones en el apetito, a menudo con aumento o pérdida de peso
  • Cansancio y falta de energía
  • Sentimientos de inutilidad, odio a sí mismo y culpa
  • Dificultad para concentrarse
  • Movimientos lentos o rápidos
  • Inactividad y retraimiento de las actividades usuales
  • Sentimientos de desesperanza o abandono
  • Pensamientos repetitivos de muerte o suicidio
  • Pérdida de placer en actividades que suelen causar placer
  • Pérdida del deseo sexual 

 

Existen múltiples causas por las cuales una persona puede desarrollar y presentar signos o síntomas de padecer depresión. En ocasiones se debe a causas internas, por herencia genética de padres a hijos o una desregularización hormonal o de neurotransmisores. O, por causas externas, como comportamientos aprendidos o sucesos del entorno como consumo excesivo de alcohol o drogas, afecciones médicas o dolor crónico a largo plazo, un evento específico como la pérdida de un ser querido, de un trabajo o de la propia salud y el aislamiento social. 

 

Siempre es recomendable buscar la ayuda de un especialista en salud para recibir el diagnóstico y tratamiento adecuado. En caso de padecer depresión, es necesario tratarla, así como tratamos una fiebre, una tos, etc. La depresión no es algo que desaparece o que se cura sola, no es cuestión de echarle ganas o simplemente decidir no tenerla. 

 

No existe un solo modelo de depresión, ésta no siempre se ve igual y afecta de diferente manera a cada individuo. En el caso de las mujeres, es común que tengan mayor tendencia a padecer depresión debido a factores biológicos, ciclos de vida y hormonales que solo las afecta a ellas; en las mujeres se pueden identificar síntomas como tristeza, falta de autoestima y sentimientos de culpabilidad. En caso de los hombres, éstos son más propensos a sentirse cansados, irritables y en ocasiones, enojados o molestos, pueden perder interés por el trabajo o actividades que antes producían placer; muchos hombres no son capaces de reconocer que estos síntomas son indicativos de depresión y por lo tanto, no buscan ayuda. 

 

En el caso de los adultos mayores, los síntomas son mucho menos evidentes, lo cual lo hace mucho más peligroso. En niños y adolescentes es muy común que presenten cambios drásticos de humor, tendiendo más a la irritabilidad, y presentando problemas en la escuela. 

 

La psicoterapia, es una herramienta sumamente útil y recomendada por especialistas en la salud, como tratamiento para la depresión, porque brinda la oportunidad para aprender nuevas maneras de pensar y comportarse, así cómo puede ayudar a cambiar hábitos que contribuyan a la depresión. La terapia ayuda a entender y resolver problemas y relaciones o situación difíciles. 

 

A medida que tu, o el ser querido que padece depresión, continúen con el tratamiento, poco a poco irán viendo cambios y sintiéndose mejor. No te presiones. Algunas otras cosas que pueden ayudar son:

 

  • Trata de mantenerte activo y haz ejercicio
  • Divide las tareas grandes en tareas pequeñas, establece prioridades y haz lo que puedas cuando puedas
  • Pasa tiempo con otras personas y habla con un familiar o amigo sobre lo que sientes
  • Retrasa la toma de decisiones importantes en tu vida hasta que te sientas mejor y habla sobre tus decisiones con otras personas que te conozcan bien
  • No te automediques con alcohol ni con medicamentos que no te hayan sido recetados por un especialista 

 

Pero lo más importante, recuerda que nada de esto es tu culpa. Cuida de ti, tu bienestar emocional y de tu salud emocional, así como cuidas de los demás, de tus mascotas y todas las plantas que insistes en mantener vivas. 

Tómate las cosas con un poco más de calma, además, a la única persona a la que debes algo es a TI mismo. 

 

No estás solo.